El argumento del abogado defensor de un hombre juzgado por un ataque brutal contra su expareja, a la que después de golpear con una piedra le sacó los ojos, han causado gran indignación en Chile. Hasta la presidente Michelle Bachelet expresó su repudio por este estremecedor caso.
Cuando las agresiones en su contra parecían haber terminado, Nabila Rifo, la protagonista del caso de violencia de género más sonado del último año en Chile, volvió a ser objeto de noticia.
El argumento usado por el defensor, Ricardo Flores, para convencer la Corte Suprema y la opinión pública de que Ortega no merecía la condena recibida, no obstante, dejó a muchos chilenos estupefactos. El martes, al salir de la audiencia en el máximo tribunal del país afirmó: “Si uno hace un análisis lógico, del punto de vista de la pena, habría sido más barato haberla matado, que simplemente haberla dejado viva”. Luego agregó que “No había nada para impedirlo, si él la hubiera querido matar la hubiera matado”.
Sus declaración causaron indignación hasta en la presidenta Michelle Bachelet quien no dudó en expresar su repudio. “Indignantes las declaraciones del abogado del agresor de Nabila Rifo. Son de una profunda violencia. No se pueden tolerar”. Unas horas más tarde, la Defensoría Penal Pública, entre otras entidades, se sumó a las críticas de la mandataria emitiendo una carta en la que reitera su “compromiso con la prevención, sanción y erradicación de la violencia contra la mujer” y destacó que “las expresiones vertidas por el defensor público no se condicen ni con la política, ni con la labor institucional”.
A pesar de las campañas realizadas por el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género y otras organizaciones por los derechos de la mujer, las tasas de feminicidios no se reducen de manera sostenida en Chile. En 2014 y 2015, se registraron 40 y 45 feminicidios respectivamente. La cifra bajó a 34 el año pasado, pero en lo que va de 2017 ya van 23 asesinatos de ese tipo.
Las palabras del defensor público de Ortega son una muestra más de esta revictimización a la que Nabila y muchas mujeres chilenas son expuestas hoy aún. Aunque la indignación que ha provocado revela que la sociedad ha avanzado, alejándose de la indiferencia que predominaba en el pasado, según Paula Sáez, queda un largo camino por recorrer.
“Falta demasiado por avanzar, porque este tipo de “errores” como dicen para minimizar los actos, son de una extrema gravedad. Las declaraciones del abogado son casi una incitación al feminicidio. Eso es muy grave, no sólo para Nabila, cuyo caso es paradigmático de cómo una sociedad en conjunto puede maltratar y seguir maltratando una víctima de violencia, sino que tiene efectos muy potentes para la sociedad en general”, dice Sáez. “Es un mensaje que reciben los niños y son argumentos que se instalan como cosas posibles dentro de una cultura”.
La Corte Suprema definirá el 11 de Julio si anulará el juicio a Mauricio Ortega.
COMMENTS