«Programas presidenciales 2013 ¿Estamos las mujeres?»

fotos candidatos

En medio de un debate televisivo y radial, presentación de programas presidenciales, encuestas de opinión pública y fuegos cruzados, se desarrolla la recta final de la campaña electoral. Las y los candidatos a La Moneda se juegan sus mejores cartas, con miras a captar el voto de la ciudadanía y reconociendo –para pesar de algunos/as- que Chile no es el mismo.

El reciente sondeo del Centro de Estudios Públicos, CEP, marcó una clara tendencia por la candidata de la Nueva Mayoría, Michelle Bachelet, dándola casi por segura ganadora en la primera vuelta electoral, el próximo 17 de noviembre. A tres semanas de los comicios, es complejo vaticinar el porcentaje de apoyo «real» hacia un candidato/a u otro. Más aún porque hay un número importante de electorado indeciso y considerando un padrón electoral que no es rígido producto de la inscripción automática y el voto voluntario.

La fotografía que han mostrado las encuestas y su efecto predictivo, es una de las aristas de esta elección presidencial. Preocupa la sub representación de algunos candidatos en las encuestas y un sistema binominal que genera importantes cortapisas para que las minorías se expresen.

Conocidos los programas de las y los nueve candidatos, se han posicionado algunos temas. En los sucesivos debates, han mostrado sus mejores cartas, aludiendo a propuestas de Gobierno innovadoras y donde los ejes centrales han sido educación, reforma tributaria y salud. Algunos/as más claros al hablar de reformas estructurales al sistema democrático como la Asamblea Constituyente o Nueva Constitución.

No obstante, pareciera estar fuera del interés de los medios y de los propios programas de las/os candidatas/os un énfasis certero en la agenda de los derechos humanos de las mujeres. El último ranking de Igualdad de Género presentado por Foro Económico Mundial ubicó a Chile en el último lugar del cono sur, dando cuenta del poco avance en la equidad laboral y participación política de las mujeres. Lo anterior, devela lo que por años han sostenido las organizaciones feministas y de mujeres: la democracia está en deuda con la igualdad de género.

Bajo este escenario, el Observatorio de Género y Equidad conversó con los encargados/as de programas de las y los candidatos presidenciales para conocer no sólo su carta de navegación. También para saber ¿cuánto hay de una agenda para la igualdad de género?

Claudia Hormazábal. Comando candidato Independiente, Franco Parisi: «Se busca incorporar en la primera infancia, instituciones de integración, respeto, igualdad de género». Leer más

Cinthya Vergara, Comando candidato Partido Humanista, Marcel Claude: «Apuntamos hacia la consolidación de una Sociedad de Derechos que tenga a las personas como el centro del desarrollo». Leer más

Eduardo Salas, Comando candidato Partido Regionalista Independiente, Ricardo Israel: «En el aspecto económico y laboral se requiere una modificación para que se fortalezca el papel de la mujer«. Leer más

Patricia Morales, Comando candidato Partido Progresista, Marco Enríquez-Ominami: «Nuestro sistema político ha forzado la postergación de reivindicaciones históricas en materia de igualdad de género». Leer más

Equipo programático, Comando candidata Partido Igualdad, Roxana Miranda: «En nuestra propuesta de revolución electoral, proponemos leyes de cuotas en todas las elecciones». Leer más

Carmen Andrade, Comando candidata Nueva Mayoría, Michelle Bachelet: «El programa compromete la ejecución de una Nueva Agenda de Género basada en los derechos, igualdad y autonomía de las mujeres». Leer más

Christian Jorquera. Comando candidato Independiente, Tomás Jocelyn-Holt: «Lo primero será impulsar una ley de cuotas tanto en cargos de representación popular como en cargos públicos». Leer más

 

Por Fabiola Gutiérrez, periodista del Observatorio de Género y Equidad

 

 

 

francoClaudia Hormazábal. Equipo programático Candidatura Presidencial Independiente Franco Parisi.

¿Cuáles son los grandes ejes del proyecto político y propuesta programática del candidato presidencial Franco Parisi?

Términos como justicia y equidad han sido suficientemente manoseados por los gobiernos de turno. Nosotros apuntamos a rescatar las bases que no sólo sustentan estos principios, sino que nos permiten provocar el reencuentro de los miembros de nuestra sociedad con derechos que les son propios desde la cuna: los derechos humanos; su restitución, en caso de haber sido vulnerados, y el fortalecimiento del Estado como garante de estos derechos. El objetivo: no seguir abordando condiciones de vulnerabilidad, sino procurar que estas no vuelvan a ocurrir.

¿Cuál es su opinión del estado actual de la equidad y justicia de género en Chile?

No podemos dejar de reconocer los avances que en esta materia se han hecho en los últimos años, pero es claro que pese a los programas y políticas establecidas, no ha sido posible conseguir los objetivos planteados. Podemos reconocer derechos, dictar normas y leyes, crear institucionalidad; pero todo pasa por un cambio en las actitudes de las personas, el cambio cultural es una cuestión de largo plazo, formar y educar en este sentido, se vuelve prioritario.

En ese sentido ¿Qué propuestas impulsarán para la igualdad de género, entre hombres y mujeres?

Educar a la familia (Escuela para padres del Ministerio de la Infancia y Juventud) para fortalecer al núcleo que constituye la base de formación de los niños y niñas. De este modo, se busca incorporar en la primera infancia, instituciones de integración, respeto, igualdad de género, entre otras; y fortalecer el desarrollo de habilidades blandas tales como la tolerancia, la empatía y la resiliencia.

Educación. Incluir en las mallas curriculares cursos formativos orientados a trabajar la contingencia país en torno a sus actores sociales, promover la discusión y crear conciencia de los escenarios que se presentan debido a situaciones de violencia, discriminación e inequidad. Empoderar.

Medidas resolutivas inmediatas:

  • Creación de un fuero paternal, que proteja el trabajo del padre desde la concepción y hasta 6 meses después del nacimiento del hijo o hija.
  • Trasladar el costo de las salas cunas al empleador del padre.

Ambas medidas están orientadas a equilibrar los «riesgos» que significan para una empresa una mujer en edad fértil, y que explican en cierta medida la diferencia de sueldos entre hombres y mujeres, para un mismo cargo; e incluso condicionan la contratación de mujeres.

Revisa programa de Franco Parisi

 

 

 

 

marcelCinthya Vergara Silva, Equipo Programa Movimiento Todos a la Moneda. Candidato presidencial Marcel Claude.

¿Cuáles son los grandes ejes del proyecto político y propuesta programática del candidato presidencial Marcel Claude?

El Movimiento Todos a la Moneda tiene como principales ejes políticos la construcción de una sociedad de derechos y la refundación del país basado en tres pilares: Asamblea Constituyente, Recuperación de Nuestros Recursos Naturales y Reforma Tributaria.

Con estos dos ejes y sus tres pilares apuntamos hacia la consolidación de una Sociedad de Derechos que tenga a las personas como el centro del desarrollo y garantice su buen vivir, respetando la vida y el medio ambiente. Con ello, el modelo que esperamos construir es de una sociedad y modelo económico con base en la confianza, cooperación, aprecio, co-determinación, solidaridad y convivencia en armonía con el medio ambiente.

¿Cuál es su opinión del estado actual de la equidad y justicia de género en Chile?

En el Chile actual no se garantiza el derecho a la igualdad ni de género, ni sexual. Las mujeres perciben menores ingresos por las mismas labores desempeñadas por hombres, perciben menores jubilaciones. Los sectores de la diversidad sexual no tienen el derecho a un matrimonio como las parejas heterosexuales. Estas problemáticas sociales son parte de las demandas ciudadanas que no reflejan el Chile que vivimos, una sociedad liberal en lo valórico pero extremadamente conservadora en lo institucional-legal.

En ese sentido ¿Qué propuestas impulsaran para la igualdad de género entre hombres y mujeres?

Nuestro objetivo es transformar las relaciones, personales, sociales, políticas, económicas y culturales de dominación y ejercicio del poder, en el marco de un proceso de emancipación y autonomía que entreteja múltiples formas de pensar, sentir, conocer y percibir.

Es fundamental considerar como principio la transversalidad de género. El Ministerio y su institucionalidad han de iluminar a todas las reparticiones públicas, servir de sustrato y presencia permanente de toda política pública.

Se debe contar con instancias jerarquizadas que cuenten con presupuesto y recursos humanos que garanticen la implementación de políticas transversales y específicas que asuman la agenda de la despatriarcalización a nivel de los gobiernos: nacional, regional y municipales. Se propone la creación de una oficina de género en cada uno de los Ministerios.

Nuestra propuesta contemple el desarrollar una institucionalidad dependiente del Ministerio de Género y Diversidad Sexual que asuma la descolonización y despatriarcalización para poder destrabar progresivamente, nuestra conformación de sentidos y significados en torno al modelo patriarcal, que impone jerarquías y diferencias entre géneros. Además queremos crear gobernanza de carácter plurinacional como expresión permanente de la diferencia.

Queremos erradicar y prevenir la violencia de género y diversidad sexual. Aumentar la participación y promoción ciudadana con la implementación de un observatorio que evalúe la integración social, a fin de generar estudios vinculantes a políticas públicas de género que, además, sean construidas a partir de los territorios adecuadamente representados, a través de procesos de toma de decisión anti autoritarias y anti patriarcales.

Esperamos también profundizar la presencia y participación política de las mujeres y diversidades de género, con la finalidad de aportar con una nueva forma de ejercer poder y representar sus voces e intereses en los procesos de toma de decisión, siendo un reto la transformación de las formas y estructuras autoritarias y patriarcales del ejercicio de poder político. Para ello se realizarán reformas legales para garantizar el ejercicio de la autonomía de mujeres, hombres y diversidades de género sobre sus cuerpos y el derecho a decidir, será despenalizado el aborto y se creará un plan de educación sexual integral en todos los niveles educacionales.

 Revisa programa Marcel Claude

 

 

ricardoEduardo Salas, Jefe de Campaña y Programa candidato del Partido Regionalista Independiente, Ricardo Israel.

¿Cuáles son los grandes ejes del proyecto político y propuesta programática del candidato presidencial Ricardo Israel?

El gran eje del proyecto del candidato, que es la expresión del Partido Regionalista Independiente, PRI, y del movimiento regionalista que lo sustenta, es precisamente la regionalización. Nosotros hemos dicho reiteradamente que no se justifica la existencia de un partido político como el PRI, ni de una candidatura presidencial hoy y mañana, si no hubiese una propuesta tan profunda en materia de regionalización que el país requiere para desarrollarse. Nosotros decimos que Chile jamás será desarrollado si no se descentraliza eficazmente. El Estado unitario, pero fundando en sus regiones, es decir, el Estado regional.

El Estado regional en términos programáticos consiste en que no sólo se debe obtener autonomía política –porque creemos que las regiones están preparadas para autogobernarse- porque no bastaría con regionalizar y tener concentrada el poder político en la capital de la región para luego dejar a las provincias abandonadas o aisladas. Los gobernadores deben ser electos directamente y las provincias deben tener representantes populares provinciales o una asamblea provincial. Tiene que existir los plebiscitos locales, regionales y provinciales para resolver problemas propios de cada zona.

La democracia representativa que está en crisis a nivel general, en materia regional al tener democratizada las regiones y provincias se podrá tener una democracia participativa. Este es el centro político de la reforma regional.

Hay una parte económica de esta reforma. En ese sentido, hemos señalado dos cosas. Insistimos en el Estado unitario fundando en sus regiones porque sabemos que hay algunas que no tienen capacidad endógena de crecimiento. Hay regiones como Arica o la Patagonia que requieren de un rol del Estado fundamental, porque debe hacerse cargo económicamente de estas regiones. El Estado central tiene una tarea fundamental.

Las actividades económicas desarrolladas en las regiones, sus tributos deben ser pagados en las regiones. Se debe hacer una reforma tributaria que implique regionalizar los tributos de manera gradual. Necesitamos un cambio constitucional para generar estos compromisos. Y, en esos términos, sí creemos en una nueva Constitución, la cual no se construye con una mayoría provisoria o circunstancial, porque se trata de imponer las reglas del juego a toda la sociedad. Se deben alcanzar grandes pactos para transformaciones reales.

Se debe reorganizar el presupuesto público. El Estado sigue siendo un actor importante, aunque el motor de la economía sea el sector privado. Los consejeros regionales podrán decidir sobre el presupuesto en un momento determinado.
Otro de los conceptos que hemos elaborado con mucha fuerza es «construir el nuevo centro político», republicano, moderado, democrático y de grandes acuerdos. Rol que cumplieron en la historia de Chile la Democracia Cristiana hasta antes del plebiscito del año ’88 y el Partido Radical en el siglo pasado. Rol que hoy nadie está cumpliendo y que para nosotros es fundamental.

En materia social las cosas no están funcionando, se debe «emparejar la cancha», para lo cual se requieren reformas importantes en materia económica, fomentar la mediana y pequeña empresa y fortalecer a la clase media.

En los temas de carácter valórico y cultural, entendemos que se debe pretender a dignificar los nuevos derechos que han ido apareciendo. Por ejemplo, creemos que en materia laboral, de cuidado de los hijos y cultura familiar es fundamental la igualdad de género. Cosa que hoy en día no se cumple. El machismo sigue estado enraizado en nuestra cultura. Aunque estamos por este cambio cultural, no significa que estemos de acuerdo que existan los derechos reproductivos de la mujer con el fin de ocultar el aborto y hablar de soberanía del cuerpo. Esto es un eufemismo desde el punto de vista jurídico.

El aborto no es un derecho, es una excepción. Los derechos son los derechos y el aborto no lo es. En todo caso, como hablamos de excepción, cuando está en riesgo la vida de la madre hay que hacer todos los esfuerzos de salvar su vida.

¿Cuál es su opinión del estado actual de la equidad y justicia de género en Chile?

En el caso de Chile siegue siendo precario, pero tenemos una diferencia importante en relación a otros países de Latinoamérica. Culturalmente hablando somos menos machistas. El país está viviendo procesos que se deben traducir en cambios y así lo constatamos con algunas series de televisión que nos muestran otro Chile en relación al actual (refriéndose a la serie los ’80).

Por otra parte, hemos planteado que el Servicio Nacional de la Mujer debería ser un ministerio. Asimismo, ha sido significativo que se haya instalado en la sociedad el concepto de la violencia intrafamiliar, porque se estableció en las leyes y en los procesos judiciales, lo que ha mejorado sustancialmente.

Estamos por apoyar la Ratificación del Convenio 189 de la OIT, aunque reconocemos los avances en la legislación chilena. Se debe debatir sobre el derecho a sala cuna e igualar la jornada laboral. Creemos que con el proyecto de regionalización está más cerca el Estado de la gente y es posible que estos temas estén presentes. Por eso estamos planteando la creación del Ministerio de la Familia. Las familias hoy en día son diversas.

En ese sentido ¿Qué propuestas impulsaran para la igualdad de género entre hombres y mujeres?

Nuestras propuestas están centradas en dos ejes. En el aspecto económico y laboral se requiere una modificación para que se fortalezca el papel de la mujer. A igual trabajo igual pago. La tarea es un desafío para el sector público y privado.

Creemos en la igualdad de género en materia cultural-educacional. Es decir, porque el 90% de quienes ingresan a la carrera de Enfermería son mujeres. Hay que fomentar el ingreso de hombres y las universidades del Estado deberían poner un aliciente para que estos postularan, lo que produciría igualdad. Lo mismo, en que mujeres ingresen a carreras de Ingeniería.

Respecto a la participación política, no creemos en la discriminación positiva. Es posible que las mujeres compitan de igual a igual con los hombres.

Revisa programa de Ricardo Israel 

 

 

 

 

marco-presidentePatricia Morales, Vicepresidenta de Asuntos Programáticos campaña Marco Enríquez-Ominami

¿Cuáles son los grandes ejes del proyecto político y propuesta programática del candidato presidencial Marco Enríquez Ominami?

Creemos que el Estado debe garantizar ciertos derechos universales. Es decir, que una sociedad progresista es aquella en la cual el Estado y no el mercado, regulan cuatro materias fundamentales para el desarrollo de una Nación: Educación, Salud y Pensiones.

Por lo mismo, se trata de áreas en las cuales el sector privado no puede lucrar con fondos públicos sino que debe garantizar acceso, calidad y equidad.

En concreto, nuestro programa plantea cuatro ejes fundamentales, con las siguientes propuestas:

Educación:

Pre- escolar:

  1. Aumentar la cobertura de las salas cunas
  2. Establecer que el empadronamiento de las salas cunas debe ser vinculante y obligatorio. La sala cuna que no lo tenga no podrá funcionar.
  3. Mejorar los estándares de calidad, en particular el ratio parvularia-menor.
  4. Mejorar el estatuto de los técnicos parvularios.

• Escolar:

  1. Fin al lucro en particulares subvencionados
  2. Fin del copago
  3. Aumento de la subvención escolar en particulares subvencionados y liceos fiscales, por matricula y no por asistencia.
  4. Crear un nuevo sistema de evolución, multidimensional.

• Universitario:

  1. Gratuidad de las universidades estatales, publicas laicas y republicanas
  2. Arancel diferenciado en universidades privadas. Ningún alumno deberá pagar más de un tercio de su ingreso autónomo
  3. Nuevo sistema de acreditación. En un lapso de 10 años, todas las universidades deberán haber desarrollado pre grado, post grados y líneas de investigación y extensión.

En Salud proponemos:

A. Derecho universal

  • Propuesta 1: Nueva Constitución que consagre el acceso, calidad y equidad de la salud como un Derecho Universal Garantizado.
  • Propuesta 2: Duplicar gasto público en salud, a 6% del PIB.

B. Fortalecer APS:

  • Propuesta 3: 200 nuevos consultorios anuales.
  • Propuesta 4: Mejorar atención en consultorios. Mínimo de 20 de atención por pacientes.
  • Propuesta 5: Garantizar un staff permanente en cada consultorios, de pediatra, ginecólogo, geriatra y oftalmólogo,
  • Propuesta 6: Desmunicipalizar consultorios, garantizando derechos laborales de profesionales de la salud en la APS.

C. Nueva Política Nacional de Fármacos

  • Propuesta 7: Gratuidad de los medicamentos para los beneficiarios del Sistema Público de Atención. Recibirán la totalidad de los medicamentos que se les prescriban, favoreciendo el uso de medicamentos genéricos bioequivalentes.
  • Propuesta 8: Creación de un Laboratorio Nacional de Fármacos.El Estado debe tener un Laboratorio Farmacológico para garantizar la producción de fármacos y venta sin sobreprecio. Es un tema de seguridad de Estado
  • Propuesta 9: Reincorporar la prescripción por nombre genérico.

D. Nueva Política Nacional de Hospitales

  • Propuesta 10: 10 nuevos hospitales.
  • Propuesta 11: 18.000 nuevas camas para los hospitales públicos de Chile.
  • Propuesta 12: Terminar con Ley de Hospitales Concesionados que profundiza el lucro en salud, con fondos públicos.Propuesta 13: Invertir en infraestructura para terminar con la transferencia de fondos públicos a clínicas privadas, que lucran con esos dineros, puesto que la modalidad de libre atención permite atenderse en centros privados debido a la falta de capacidad de los centros públicos.

E. Plan Universal de Salud

  • Propuesta 14: Crear un «Fondo Universal Solidario de Salud – FUSS» que estará compuesto de aportes fiscales, de parte de las cotizaciones de los afiliados a FONASA y parte de las cotizaciones de los beneficiarios afiliados a las ISAPRE.
  • Propuesta 15: Las Isapres deben transferir parte de sus utilidades a Fonasa.

¿Cuál es su opinión del estado actual de la equidad y justicia de género en Chile?

La persistencia del carácter tradicionalista y conservador de nuestro sistema político ha forzado la postergación de reivindicaciones históricas en materia de igualdad de género. Por ejemplo, en lo que respecta a derechos sexuales y reproductivos; a la participación en instancias de decisión política; a las condiciones de trabajo y a la distribución de las tareas de cuidado. Esto a pesar de la amplia legitimidad de la cual goza el objetivo de la igualdad de género entre la ciudadanía.

En el actual período gubernamental (2011-2014) se registran retrocesos en el abordaje de las políticas de género. Esto se refleja en el nuevo Plan de Igualdad de Oportunidades (PIO) 2010-2020, que modifica el que fuera elaborado participativamente en el anterior período gubernamental: la nueva versión del PIO omite temas como la autonomía sobre el propio cuerpo o los derechos sexuales y reproductivos, reemplazándolos por temas de salud general.

Chile ha caído abruptamente en el ranking de Igualdad de Género del Foro Económico Mundial (WEF- The World Economic Forum): desde el puesto 46 que ocupaba en el año 2010, bajó hasta el 87 en el 2012. En el caso chileno, esta caída se debe a resultados alarmantes en las categorías participación política (0,1448 puntos, rango 64) y participación y oportunidades en la economía (0,5475 puntos, rango 110). Entre los 111 países analizados desde 2006, un 88% (98 países) mejoraron la situación de desigualdad, mientras que en 13 países se ampliaron las brechas. Lamentablemente, Chile forma parte de estos últimos.

En ese sentido ¿Qué propuestas impulsaran para la igualdad de género entre hombres y mujeres?

Tenemos múltiples propuestas entre las cuales impulsaremos una nueva Constitución para Chile, que:

  • Cautele el principio de igualdad entre mujeres y hombres
  • Reconozca los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres.

Pondremos urgencia a la discusión parlamentaria con el fin de ratificar el Protocolo Facultativo de la CEDAW, que obliga internacionalmente al Estado de Chile en materia de resguardo de derechos de las mujeres, y daremos urgencia también a la discusión sobre la Ley Marco de Derechos Sexuales y Reproductivos que se encuentra en el Congreso nacional desde el año 2000 en estado de primer trámite constitucional.

Asumiremos el compromiso presidencial con un gobierno igualitario sostenido.

  1. Garantizar un adecuado cuidado infantil y facilitar la salida al mercado laboral:Pago compartido de la sala cuna para los hijos menores de dos años a todas las madres y padres asalariadas/os, más allá del tamaño de la empresa.
  2. Aumentar la cobertura de las salas cunas y jardines infantiles a lo largo del país.
  3. Ampliar la cobertura del programa de cuidado de infantes «4 a 7» de SERNAM.

Impulsaremos el análisis y seguimiento de la Ley de igualdad salarial entre hombres y mujeres para el mismo puesto de trabajo.

Cautelaremos los derechos laborales y la salud e integridad de las trabajadoras, con especial atención a las industrias que proveen empleo estacional. Especialmente en el caso de las temporeras agrícolas, creemos necesario cautelar la existencia de contrato laboral y el control en el uso y exposición de las trabajadoras a agrotóxicos.
Apoyaremos el emprendimiento y el desarrollo de redes económicas y comunitarias de mujeres indígenas. Garantizaremos los derechos laborales de las mujeres inmigrantes.

Revisaremos la propuesta de ley para reformar la sociedad conyugal propuesta por el gobierno en 2011 que, aunque plantea derogar la sociedad conyugal, tal como está planteada podría profundizar desigualdades.

Fortaleceremos la justicia en violencia de género e intrafamiliar en cada una de las regiones del país y duplicaremos la cantidad de Casas de Acogida para mujeres víctimas de violencia en un periodo de cuatro años.

Aseguraremos la atención adecuada, oportuna, humanizada y confidencial en caso de embarazo juvenil. Fiscalizaremos y aseguraremos el acceso a métodos anticonceptivos en todos los consultorios del país. Fomentaremos la reposición de la norma que autoriza el aborto terapéutico; en caso de riesgo para la vida de la madre, inviabilidad del feto y violación.

Crearemos Centros de Salud Amigables para Adolescentes y Jóvenes en Salud Sexual y Reproductiva. Crearemos Centros de Atención en Reproducción Asistida en el Sistema de Salud Pública. Crearemos programas de Salud Sexual y reproductiva para hombres en los consultorios de atención primaria.

Plan progresivo hacia la igualdad en la representación de género en cargos de elección popular.

Revisa programa de Marco Enríquez-Ominami

 

 

 

rmirandaDaniel Giménez, Coordinador Programático campaña de Roxana Miranda. Marcela Morales, Frente de Género del Partido Igualdad.Catalina Pérez, Frente de Género del Partido Igualdad.Virjina Toro, Movimiento de Pobladores en Lucha.

¿Cuáles son los grandes ejes del proyecto político y propuesta programática de la candidata presidencial Roxana Miranda?

Cinco son los ejes de la propuesta programática de Roxana Miranda:

  • Superación del capitalismo 
  • La creación de una República en la que el pueblo mande
  • La recuperación de nuestros derechos
  • El buen vivir
  • Una sociedad igualitaria e integrada

¿Cuál es su opinión del estado actual de la equidad y justicia de género en Chile?

En términos generales, nos parece que las políticas de igualdad de género de los últimos 23 años han fracasado, y que ese fracaso se debe a dos razones principales. La primera, es la desarticulación de parte del movimiento de mujeres, que, como ocurrió con el movimiento popular y el movimiento sindical, terminó fagocitado e inmovilizado por la transición y los gobiernos de la Concertación.

La segunda razón, es la creciente pérdida de contenido y sentido político en los proyectos del diezmado movimiento de mujeres a partir de 1990. Con la transición se opera un importante cambio de paradigma en la forma en que se aborda el problema de la equidad de género en Chile: se abandonó el enfoque eminentemente político del activismo de la década de 1980 y se empezó a abordar desde la óptica neoliberal tecnócrata que abrazó e hizo suya la Concertación.

Casi 24 años después, el debilitamiento del movimiento de mujeres y el modelo «femócrata» han convertido a Chile en uno de los países más rezagados en la región en materia de equidad de género. En el ámbito económico y laboral, por ejemplo, según cifras del INE, al concluir el año 2010, la tasa de participación de las mujeres en el mercado laboral alcanzaba sólo a 41,9%, mientras que la de los hombres era de 70,7%. Para la CEPAL, la tasa promedio de participación de las mujeres en todos los países de América Latina para el mismo año 2010 era de 52,8%. Sólo Cuba y Honduras tenían una tasa menor a la chilena. Chile, por lo tanto, es uno de los tres países más rezagados en la región en materia de participación de la mujer en el mercado de trabajo.

La comparación con lo logrado por los otros países los últimos 24 años hace aún más vergonzoso el rezago de Chile. Al iniciarse el proceso de femocratización neoliberal, en 1990, la tasa de participación en el mercado laboral de las mujeres chilenas era de 31,3%.

En 20 años de políticas neoliberales radicales, por lo tanto, Chile consiguió un avance de 10 puntos porcentuales (hasta el 41,9% mencionado). El mismo año, la mayor parte de los países de América Latina tenía tasas similares o inferiores a las de Chile. Argentina, por ejemplo, tenía una tasa de 29%; República Dominicana, 26%; Guatemala 28%; Ecuador, 33%; Venezuela, 32%. Y así sucesivamente. Pero el año 2010 todos esos países nos habían superado, y por mucho. Argentina había alcanzado 51%; República Dominicana, 58%; Guatemala, 46%; Ecuador, 54%; Venezuela, 53%. Chile en 20 años de coherentes y sistemáticas políticas neoliberales logró incrementar en 10% la participación de las mujeres en el mercado laboral. En cambio, en el mismo plazo, pero con otros modelos, esos países habían lograron una incorporación al mundo laboral de las mujeres significativamente superior.

Algo similar ocurre con la brecha salarial entre hombres y mujeres. En 20 años de políticas neoliberales, la brecha en Chile se redujo desde 70% en 1990 a 80,1% en 2011. Esos 10 puntos son vergonzosamente bajos comparados con los logros de otros países en esta materia. Según datos de CEPAL, Ecuador pasó de 64,9% en 1990 a 95,6% en 2011. Así como se lee: en el mismo período que el Chile neoliberal disminuyó la brecha en 10 puntos, Ecuador, con otras políticas y otros enfoques, la redujo en 31. Y el de Ecuador es sólo un caso. En un período similar (años más, años menos), Honduras pasó del 72% al 94,4%, Nicaragua del 67,9% al 89,7%, Venezuela del 80% al 98%. En comparación con estas cifras, lo de Chile no es sino fracaso.

Otras evidencias del fracaso:

  • Según datos del propio gobierno (Casen 2011), la jefatura femenina ha aumentado hasta el 55% en los hogares más vulnerables (pobres e indigentes), y las familias encabezadas por una mujer, en todos los quintiles de ingresos, incluidos los más altos, cuentan con menos recursos y son más precarias.
  • A las jornadas de trabajo en condiciones de explotación, precariedad y desigualdad respecto al trabajo de los hombres, las mujeres suman diariamente, como mínimo, entre 3 y 5 horas de labores del hogar. El trabajo reproductivo y no remunerado a cargo de forma casi exclusiva de las mujeres sigue siendo una de las principales fábricas de desigualdad de género en Chile.
  • Con el actual sistema de AFPs se estima que los hombres recibirán una jubilación del 41% de su sueldo, pero las mujeres, por tener una mayor esperanza de vida, recibirán en promedio sólo un 22%.
  • La penalización del aborto potencia y hace más grandes las otras graves desigualdades generadas por el neoliberalismo chileno. Las condiciones de salubridad de la práctica de un aborto ilegal dependen en gran medida de las capacidades de pago, razón por la cual, una vez más, las mujeres de menores ingresos, de los sectores populares, quedan más expuestas en su derecho de elegir.
  • No es ni necesario mencionar la grosera desigualdad de género en el sistema de salud previsional, en el sistema político, en las profesiones mejores remuneradas, en los altos cargos de gerencia y toma de decisiones.

En ese sentido ¿Qué propuestas impulsaran para la igualdad de género entre hombres y mujeres?

El programa de Roxana Miranda contiene dos propuestas macro y variadas medidas micro para avanzar hacia la equidad y justicia de género. Las medidas macros son tres. La primera es abandonar la fracasada vía «femócrata» a la equidad de género y sustituirla por lo que llamamos «la vía social, política y popular hacia la igualdad de género». Consiste en rearticular y repolitizar al movimiento de mujeres para que retome la estrategia de lucha y transformación social abandonada con la tecnocratización. En Ecuador o en Venezuela los principales avances en igualdad de género se alcanzaron gracias a transformaciones económicas y políticas profundas. En ambos casos partieron en la constitucionalización de la igualdad de género y de derechos sexuales y reproductivos básicos, como, por ejemplo, el derecho a tomar decisiones libres sobre la salud y vida reproductiva (Constitución del Ecuador, art. 66, N° 10). En todos esos procesos fue fundamental la participación y vigilancia de un movimiento de mujeres fuerte, protagónico y organizado.

La segunda es darle a la equidad de género la importancia que tiene con una institucionalidad estatal acorde al compromiso propio de una sociedad igualitaria. Por ello, proponemos sustituir el actual SERNAM, que si bien ha operado desde 1990 con rango ministerial y como parte del gabinete, no ha dejado de ser un servicio público, limitado y de escaso alcance, por un Ministerio de la Igualdad de Género, con las atribuciones y recursos necesarios para emprender las transformaciones estructurales que requiera una sociedad igualitaria en términos de género.

La tercera medida es la transversalización del principio de la equidad de género en todos los ámbitos de la sociedad. Por ejemplo, en nuestras propuestas de reestructuración del sistema de defensa, una de las fundamentales es el desarrollo de programas de paridad de género en todas las Fuerzas Armadas que incluye: cuotas en cada rango de la carrera de oficiales, la generación de incentivos económicos para la incorporación de las mujeres a las FFAA o desarrollo de sistemas de cuidado infantil para que puedan desarrollar su carrera militar en condiciones paritarias respecto a los hombres.

En nuestra propuesta de revolución electoral, proponemos leyes de cuotas en todas las elecciones. Y así sucesivamente. Por efecto de la aplicación del principio de transversalidad, en prácticamente cada uno de los ámbitos de la sociedad se abordan los principales problemas de inequidad e injusticia de género y se plantean las propuestas que creemos necesarias para atacarlo y superarlo.

Las principales propuestas transversalizadas son:

  1. Ratificación del protocolo Facultativo de la CEDAW, e inmediata legislación para despenalizar el aborto terapéutico.
  2. Inicio de discusión territorial de la forma de avanzar hacia la garantía de los derechos reproductivos de las mujeres, lo que considera una discusión sobre la legalización del aborto gratuito y universal.
  3. Implementación de políticas de Educación Sexual, y acceso universal y gratuito a las tecnologías preventivas de embarazo y de enfermedades de transmisión sexual. Con respeto a la confidencialidad y al derecho a decidir de todas las personas.
  4. Diseño e implementación participativa de una política pública general que incentive la empleabilidad femenina en condiciones de formalidad y que se garantice, a través de fiscalización y sistema de incentivos, el principio Igual Trabajo – Igual Salario.
  5. Revisar y ampliar, como responsabilidad del Estado, la legislación referida al post natal de seis meses para garantizar que tanto los hombres como las mujeres, puedan abocarse al cuidado de hijos e hijas pequeños y ejercer su derecho al trabajo digno, si así lo desean.
  6. Incorporar en los planes y programas de escuelas y liceos, la revalorización del trabajo doméstico como un quehacer de todos/as; el respeto a las diversidades sexuales y de género.
  7. Iniciar una reforma pedagógica curricular que permita contar la historia de Chile en perspectiva popular, de género y diversidades sexuales

Revisa propuesta programática de Roxana Miranda

 

 

 

 

michelleCarmen Andrade. Encargada Red de Mujeres Comando candidata presidencial Michelle Bachelet.

¿Cuáles son los grandes ejes del proyecto político y la propuesta programática de la candidata Michelle Bachelet?

El programa del futuro gobierno constituye el inicio de un proyecto transformador de largo plazo, que apunta a modificar el actual modelo de desarrollo del país. La propuesta programática entrega los cimientos para entrar a un nuevo ciclo político, económico y social, que surge de «la gran energía y empuje de una ciudadanía que ha decidido participar y ser protagonista de la construcción de nuestro país».

La economía crece, se ha reducido significativamente la pobreza, la democracia y las libertades ciudadanas constituyen principios de la convivencia, el país está inserto y es respetado en la comunidad internacional. Sin embargo, enormes desigualdades atraviesan amplias esferas de la sociedad chilena y persisten los abusos de unos pocos, por sobre el interés de la mayoría.

Este programa encara decididamente estas desigualdades, ya que no se puede crecer sustentablemente y en paz social cuando las mayorías se sienten excluidas, discriminadas o abusadas. Este desafío exige construir «Más y mejor Estado» y realizar cambios estructurales que se expresan en tres grandes reformas: la reforma educacional que permitirá avanzar hacia una educación más equitativa, gratuita, sin lucro y de calidad en todos sus niveles, destacando que el Estado, a través de la educación pública, garantizará el ejercicio de este derecho social. La reforma tributaria, que aportará los recursos necesarios (3% del PIB) para hacer realidad estas transformaciones, aumentando la carga tributaria de las empresas y avanzando en equidad tributaria. La Nueva Constitución que garantice derechos, defina obligaciones y que responda a las demandas de los ciudadanos por mayor participación y representatividad.

«Estos cambios estructurales, unidos a algunas políticas sectoriales, como el fortalecimiento de la salud, en el ámbito público y privado, el establecimiento de nuevas condiciones laborales para nuestros trabajadores, la consolidación de un sistema integral de protección social, impulsar una descentralización efectiva, implementar una agenda de género, consolidar mejoras sustantivas en seguridad ciudadana, garantizar el respeto a nuestra diversidad e identidad, cuidar nuestro medio ambiente, avanzar en calidad de vida en el territorio y abrir nuevos canales de participación ciudadana, entre otras, son parte de los énfasis centrales del gobierno de la Nueva Mayoría».

¿Cuál es su opinión del estado actual de la equidad y justicia de género en Chile?

Las mujeres en Chile han tenido grandes avances producto de las luchas del movimiento de mujeres y de las políticas de los gobiernos democráticos. Sin embargo, estamos aún lejos de alcanzar la plena igualdad entre hombres y mujeres y, más aún, se ha producido un enorme retroceso en el reciente período de gobierno, que se refleja con nitidez en los índices internacionales de desigualdad de género.

Esta situación se manifiesta, entre otras, en el menor acceso de las mujeres al mundo del trabajo, especialmente de las de sectores pobres, y en sus deficitarias condiciones laborales, expresadas en menor sindicalización, brecha salarial, asimetría en las responsabilidades domésticas y familiares.

Así también, persisten la subrepresentación femenina en cargos de poder y de representación popular; y la violencia de género como una de las expresiones más crudas de la discriminación.

En ese sentido ¿Qué propuestas impulsarán para lograr la igualdad de género entre hombres y mujeres?

El Programa reconoce el derecho a la igualdad ante la ley y a la no discriminación entre los contenidos centrales de la Nueva Constitución; reconoce también, a nivel constitucional, la igualdad de derechos entre hombres y mujeres, incluyendo derechos y obligaciones en relación con las tareas domésticas y el cuidado de hijos(as); y compromete la acción del Estado orientada a modificar patrones socioculturales, estereotipos, prejuicios y prácticas basadas en la idea de inferioridad o superioridad de algunos de los sexos. El catálogo de derechos de la Nueva Constitución señala expresamente, entre otros, los derechos sexuales y reproductivos, el derecho a una vida libre de violencia de género, y la participación igualitaria de hombres y mujeres en los cargos de representación y en las instancias de decisión de los poderes públicos.

Junto a los cambios constitucionales, el programa compromete la ejecución de una Nueva Agenda de Género basada en los derechos, igualdad y autonomía de las mujeres, impulsada por una institucionalidad renovada y de mayor rango creando el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género. «El despliegue de esta agenda será transversal y el enfoque de género estará presente, entre otras áreas, en el diseño en las reformas educacional, del sistema electoral, las políticas laborales y la Nueva Constitución Política. Similar visión existirá en el Sistema Nacional de Inversiones, en el diseño del sistema nacional de cuidado y en la reforma al régimen de salas cunas para hijos e hijas de trabajadores, que asegurará la no discriminación de las trabajadoras e incluirá la corresponsabilidad en la crianza».

Entre las medidas de la agenda se cuentan: el fortalecimiento y ampliación de las Oficinas Municipales de la Mujer y la Equidad de Género, el diseño e implementación de un Sistema Nacional de Cuidado, una ley de derechos sexuales y reproductivos acorde a las realidades y opciones de las personas; educación sexual laica y humanista en los colegios; acceso a servicios de salud sexual y reproductiva; disponibilidad efectiva de métodos anticonceptivos, incluyendo la anticoncepción de emergencia; y despenalización de la interrupción voluntaria del embarazo en caso de peligro de la vida de la madre, violación o inviabilidad del feto.

En materia de violencia de género se plantea aumentar las Casas y Centros de la Mujer en las comunas con mayores índices de violencia, avanzar en la especialización de fiscales y jueces, ampliar el concepto de acoso sexual al ámbito educacional y legislar incorporando todo tipo de violencia de género, no sólo la violencia intrafamiliar.

En el ámbito laboral se abordan las principales barreras que limitan el acceso de las mujeres al mundo del trabajo, desarrollando programas de formación y capacitación laboral, de apoyo al emprendimiento, de salud odontológica y extensión horaria en salas cunas, jardines y colegios. Se fortalece la fiscalización de las normas contra la discriminación de género, se modifica la ley de igualdad de remuneraciones para hacerla efectiva, se reforma el régimen de salas cuna para hijos e hijas de trabajadores, que asegurará la no discriminación de las trabajadoras e incluirá la corresponsabilidad en la crianza.

Asimismo, se establecen políticas para lograr la participación equilibrada de mujeres y hombres en las distintas instancias de decisión y representación política, programas de difusión de derechos y un Fondo Nacional para apoyar iniciativas que fortalezcan la asociatividad y liderazgo de las mujeres.

Respecto de la vinculación con el sistema educativo, se propone reinstalar en la formación docente, los programas de estudio y textos escolares, ejes y lineamientos educativos que permitan modificar prácticas sexistas y estereotipos de género y que promuevan el respeto por la diversidad sexual. Adicionalmente, se implementarán programas de derechos humanos con enfoque de igualdad de género en todo el ciclo escolar y se instalarán dispositivos en el Mineduc para proteger y asistir, dentro de otros temas, a alumnos y alumnas afectados por prácticas discriminatorias.

Revisa programa Michelle Bachelet

 

 

 

tomasjhChristian Jorquera, Coordinador programático candidatura Tomás Jocelyn –Holt

¿Cuáles son los grandes ejes del proyecto político y propuesta programática del candidato presidencial Tomás Jocelyn-Holt?

Hay dos aspectos relevantes. En el sentido no programático el candidato siempre ha señalado que «se debe superar el pasado y demostrar que la sub-35 tienen la llave para ser los protagonistas del país». No hablamos sólo desde el discurso, hay una confianza depositada en las y los jóvenes.

En el sentido programático, tenemos tres grandes ejes. La reforma tributaria para aplacar las cosas que se están planteando. Se pueden proponer un sinfín de cambios, pero si no sé tiene el dinero es difícil poder realizarlas. Lo más innovador en nuestra propuesta es, justamente, proponer un food (impuesto especial a las grandes empresas) retroactivo que se les cobre durante los 4 años de Gobierno, es decir, un 25% anual que lograría cubrir cuatro puntos extras del PIB. A ello se sumaría, el impuesto al alcohol y el tabaco.

En el ámbito educacional tenemos una batería gigante de medidas, comenzando con la educación preescolar, la escolaridad y la educación superior. También proponemos una política de posgrados que no existe en Chile. En la etapa preescolar es necesario abocar todos los recursos para que posteriormente, lo que sigue, funcione de mejor manera. En la educación escolar hablamos de desmunicipalización, fin al copago y una reforma real a los currículos escolares. En el acceso a la educación superior vamos a generar una propuesta concreta, por ejemplo, cambiar la PSU. Por último, en la educación superior hablamos de restar aranceles y darle gratuidad a cuatro puntos de la población, la obligatoriedad de la acreditación al 100% y poner en la palestra la innovación en materia de extensión de la investigación. Esto se daría en universidades públicas y privadas. En este último punto, además hemos dicho, que se debe dejar exento de tributo a las personas que tengan un sueldo menor a un millón y medios de pesos, lo que permitiría mediante el Estado dar gratuidad un sueldo menor que corresponde al 80% de la población.

Hay varios temas que son muy pequeños, pero que están dentro de aquellos que no han tenido políticas públicas durante años. No se trata de minorías, porque las reconocemos como grupos, como por ejemplo las mujeres que ha sido dejadas de lado durante el último tiempo. También hablamos de políticas para las minorías sexuales, sobre derechos reproductivos y hacia los jóvenes.

En consecuencia, el gran proyecto político es poder generar un Gobierno donde da lo mismo si eres joven, viejo, cristiano o de derecha. Acá el punto es poder llevar a cabo lo que el programa plantea. Si no tiene un Parlamento que lo respalde, es tema aparte. Como Presidente insistirá en aquellos proyectos tantas veces sea necesario, por ejemplo, con el matrimonio igualitario, serán aquellos que se resistieron al debate lo que deberán responder. La ciudadanía va a juzgar.

¿Cuál es su opinión del estado actual de la equidad y justicia de género en Chile?

Las cosas no están bien. Nos hemos sumado a campañas de organizaciones de mujeres como las de Comunidad Mujer, la campaña del cáncer, entre otras. Actualmente en el Congreso menos de un20% son mujeres y esto tiene que con una política y sociedad machista. Las políticas públicas no tienen un énfasis en los temas de igualdad. Las mujeres están relegadas de todo el aspecto político y eso genera que no hay políticas públicas adecuadas.

En ese sentido ¿Qué propuestas impulsaran para la igualdad de género entre hombres y mujeres?

Lo primero será impulsar una ley de cuotas tanto en cargos de representación popular como en cargos públicos. Generar una ley antidiscriminación más amplia, que no sólo contemple los temas actuales como la discriminación racial y por orientación sexual, también estén las mujeres presentes. Subir el rango del Servicio Nacional de la Mujer a Ministerio de la Mujer. Armar un gabinete paritario sub 35.

En materia de derechos sexuales y reproductivos, estamos por despenalizar el aborto por violación, incesto, inviabilidad fetal y peligro vida de la madre. En materia de violencia hacia las mujeres, será clave el rango ministerial que tendrá el actual SERNAM para contar con una agencia regional en cada una de las 15 regiones del país.

Revisa compromisos Tomás Jocelyn-Holt

 

 

 

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